Fue en el 2011, durante el primer año de su segundo gobierno, cuando Michelle Bachelet cumplió una de sus grandes promesas: modernizar nuestro sistema burocrático y dar inicio a la era digital dentro del Estado.
Pero ¿qué significaba este gran paso? Significaba que esas filas enormes para obtener certificados y documentos, pasarían al olvido y los tramites se harían por internet.
Lógicamente este fue el inicio y primer paso. No significa que de un día para otro se digitalizó todo, pero sí fue el comienzo de esta era.
Tras una amplia reforma tecnológica que significo la modernización de muchos departamentos internos, el Registro Civil logró el cometido y comenzó a regir la famosa clave única, los certificados online y una serie de temas que antes era imposible siquiera pensar en obtenerlos en línea.
Hoy, en el sitio Certificados de Chile, se pueden obtener un certificado de nacimiento, de defunción, de matrimonio y así muchos otros. ¿Lo mejor? Todo esto sin necesidad de moverse de la casa.
Sitio oficial del Aporte Familiar Permanente (ex Bono Marzo)
Amigas y amigos:
La verdad es que estamos muy contentos, porque éste es el décimo día de gobierno y estamos promulgando una ley que establece lo que hemos llamado el Aporte Familiar Permanente del mes de Marzo, primer proyecto de ley que enviáramos al Congreso, un día después de asumir. Y tenemos razones de sobra para tener una tremenda satisfacción por el trabajo realizado. En primer lugar, porque al promulgar esta ley lo que estamos haciendo es benefciar a más de un millón 600 mil familias que van a recibir este aporte, en un proceso de pago que se inicia este mismo mes. Y estamos, además, estableciendo no un bono, sino que un apoyo permanente, que se va a pagar todos los meses de marzo, reajustado por el IPC respectivo.
Pero no es sólo el Bono de Marzo. Tal vez, cuando mandamos la ley se le dio más importancia al Bono de Marzo, pero no a la segunda parte de este proyecto, que es tan importante como este aporte de marzo, que nos va a permitir restituir, entregar, más de 350 mil nuevos Bonos de Invierno, o, como me dijo una señora en campaña, “el bono de la parafna”, porque esa platita sirve mucho en el invierno, para poder, justamente, calefaccionar la casa, entre otras necesidades. Vamos a poder entregar a los pensionados, durante el mes de mayo, estos nuevos Bonos de Invierno. Es decir, este año, en total, más de un millón de personas van a recibir el Bono de Invierno.
Pero, en tercer lugar, por lo que estamos satisfechos, si lo primero era por el Aporte Familiar Permanente del mes de Marzo y lo segundo por los nuevos Bonos de Invierno, la tercera razón es por la celeridad con que todo este proceso se ha hecho.
Y quiero, en este sentido, destacar y felicitar la labor de los parlamentarios y las parlamentarias, que alcanzaron un consenso ejemplar y unánime de este proyecto en la Cámara de Diputados y en el Senado. Muchas gracias a todos quienes hoy día aquí representan al Congreso.
Porque creo que es un muy buen ejemplo de un trabajo coordinado entre Gobierno y Parlamento, que pone en el centro de nuestro trabajo a la gente. Ese es nuestro norte, y también así prestigiamos la actividad política ante la ciudadanía.
Gracias a todos y todas quienes se han comprometido con las familias chilenas.
Ahora, ¿cómo va a operar el pago del Aporte Permanente? Como lo hemos hecho antes, a través del Instituto de Previsión Social y, como es lo habitual, en convenio con entidades pagadoras. En todo el país va a haber más de 200 puntos de pago de la Caja de Compensación Los Héroes y más de mil 500 puntos de pago rural. Bueno, y también, por supuesto, se podrá realizar el pago. A partir del 28 de marzo se va a establecer un calendario para que cada persona sepa cuándo le toca. Y este calendario va a estar publicado a partir del día 27, a través de la página bonomarzo.cl, donde sólo con el RUT las personas podrán consultar la fecha de pago. Pero, me imagino, para aquellas personas 23 EL CHILE ACTUAL que no tengan acceso a internet, podrán acercarse a las ofcinas y los call centers para informarse.
La idea es que se puedan organizar para que no se produzcan congestiones durante el proceso. Además, lo importante, también, es que las personas van a tener nueve meses de plazo para poder cobrar su aporte, lo cual va a permitir que todas las personas que cumplan los requisitos para ser benefciarios de estos aportes, lo puedan hacer.
Amigas y amigos: Hoy día podemos celebrar de manera responsable. Estamos estableciendo un beneficio social con el que cada familia benefciada pueda contar cada año de ahora en adelante. Y lo que estamos haciendo, en realidad, es reivindicar una política social que garantiza derechos a las personas, que apunta a mejorar su calidad de vida; que no resuelve todos los temas —para eso tenemos una serie de otras medidas—, pero que de alguna manera apoya la manera como queremos enfrentar la desigualdad, y que demuestre a nuestros compatriotas que no están solos, que tanto su Gobierno como su Parlamento quieren apoyarlos para que puedan vivir con mayor dignidad y mayor bienestar.
Y ese va a ser el afán, por lo demás, que nos va a caracterizar y nos va a seguir movilizando desde el primer día hasta el último día de gobierno.
Así que, nuevamente, muchas gracias. Estamos contentos, así es que podemos celebrar esta muy buena nueva.
Hace cuatro años atravesé esta puerta por la que hoy he vuelto a entrar. Y ustedes me acompañaron en esa despedida, y hoy vuelven a estar conmigo aquí, en ésta, la casa de los Presidentes y las Presidentas de Chile.
¡Quiero agradecerles el gran cariño que siempre me han demostrado, su apoyo constante y, sobre todo, la confianza que han depositado en mí!
Ustedes han sido los protagonistas de muchos procesos que han ocurrido en este tiempo, donde la ciudadanía ha decidido ejercer sus derechos y ha tomado un lugar en la construcción de estos procesos.
Es tiempo ya de iniciar el camino que hemos comprometido en el programa de gobierno. ¡Es la hora de poner esos sueños en marcha! ¡Es hora de iniciar juntos ese camino hacia una nación desarrollada y justa, moderna y tolerante, próspera e inclusiva que todos nos merecemos! Creemos que puede haber un Chile diferente y mucho más justo.
Quiero que el día que vuelva a dejar esta casa, ustedes sientan que su vida ha cambiado para mejor. Que Chile no es sólo un listado de indicadores o estadísticas, sino una mejor patria para vivir, una mejor sociedad para toda su gente.
Sé de primera mano lo que la educación pública puede ofrecer a una persona. Yo soy hija de la educación pública, y mi compromiso es que en Chile todos tengamos esas mismas oportunidades.
Sé de primera mano lo que es luchar por una patria libre, sin enclaves autoritarios, donde la mayoría no sea vetada por una minoría. ¡Y mi compromiso es que esta plaza sea la Plaza de la Constitución, de una Constitución nacida en democracia!
Sé de primera mano lo que la salud pública hace por las personas. Soy médico, y fui ministra de Salud. ¡Y mi compromiso es que nadie quede sin remedios, sin atención profesional porque no hay un especialista o no hay una urgencia cerca!
Sé de primera mano cuáles son las preocupaciones de las jefas de hogar. Sé de la necesidad que cada mujer tiene de trabajar mientras sus hijos e hijas reciben estímulo y educación de calidad.
Estos compromisos requieren de un país dinámico, que crea empleos de calidad, que capacita, emprende e innova. Una sociedad donde los desafíos del crecimiento demandan no sólo eficiencia, sino también un acuerdo político y humano con inclusión y sustentabilidad. Y también de un país que trabaje incansablemente para que la dignidad y el respeto de los derechos sean la regla para todos y todas.
Esa es la sociedad que juntos hemos imaginado. Y ese sueño compartido es también un contrato solemne entre ustedes y esta Presidenta: ese es nuestro programa de gobierno. ¡Y vamos a llevar adelante el programa de gobierno que hemos comprometido con ustedes! Y vamos a hacerlo en un marco de diálogo con todas las fuerzas políticas y sociales. Pero un diálogo que tenga un objetivo claro, que es avanzar en el cumplimiento del programa.¡Ese es nuestro mandato ciudadano, y para eso he vuelto a ser Presidenta de Chile!
¡Un programa que compromete una Reforma Educacional que asegure gratuidad, calidad, inclusión y mejores perspectivas para los niños, niñas y jóvenes de Chile! ¡Un programa que compromete una gran Reforma Tributaria, que consagrará el principio de que quienes tienen más, contribuyan con más al bienestar de todas y todos!
¡Un programa que se compromete con el trabajo decente, con los derechos laborales, con la capacidad de negociación justa con los empleadores!
¡Un programa que se compromete con el medio ambiente, con ciudades y barrios amables, con regiones que sean protagonistas de su propio desarrollo! ¡Un programa que se compromete a atacar el delito, pero también a prevenirlo, y a acompañar y defender a las víctimas!
¡Un programa que cree que la cultura, la recreación y el deporte no pueden ser para quienes pueden pagar, sino para todos, en todas las comunas!
Amigas y amigos: Voy a ser la Presidenta de todos los chilenos y chilenas: de quienes me dieron su apoyo, de quienes no votaron por mí y de quienes no fueron a votar. Tenemos un proyecto de país que requiere de todas las miradas, sin excluir a nadie. Cada uno de nosotros puede hacer la diferencia entre excluir e incluir, entre dialogar e imponer, entre creer y desconfiar, entre sumarse y restarse.
Sólo juntos podemos reconstruir la confianza en la participación y en las instituciones. Sólo juntos podemos dar poder a lo local, dar voz a las diferentes necesidades de nuestra gente, dignifcar el trabajo y la democracia. ¡Chile tiene un solo gran adversario y se llama desigualdad! Y sólo juntos podremos enfrentarla.
Comenzaremos ahora. El tiempo es escaso, pero vamos a aprovecharlo al máximo. Iniciaremos en los primeros 100 días aquellas tareas que ya no pueden esperar. Representamos la urgencia que tienen millones, millones de chilenos y chilenas. Y porque tenemos urgencia, debemos comenzar ahora, pero construir este camino paso a paso.
Porque tenemos urgencia, no podemos apresurarnos, y sabemos que hay tareas que van a ir más allá del mandato presidencial. Porque tenemos urgencia, debemos trabajar con unidad, con generosidad y con compromiso, no por los intereses propios, sino por el bien común. ¡Juntos hemos llegado hasta aquí! Son ustedes los que me han traído nuevamente a La Moneda. Empecemos ahora mismo nuestra tarea.
Hoy día Chile cuenta con un nuevo gobierno dirigido por una mujer que de expresión también de nuevos tiempos. Tiempos de alegría, tiempos de hombres también, tiempos de jóvenes y de niños, tiempos de adultos mayores y por cierto tiempo de mujer.
Es tiempo de todas y todos en esta, mi querida patria, la patria de todas y todos los ciudadanos. Muchas gracias amigos y amigas, muchas gracias porque quiero que Chile sea de todas y todos, porque quiero que Chile sea la patria que todos queremos que sea.
Por eso vamos a trabajar, con fuerza, con energía, para que nuestra patria sea másjusta, más humana, más solidaria, más igualitaria, porque ese es el sueño que todos los que estamos aquí compartimos, porque ese el sueño que recorre nuestro país deArica hasta la Antártica chilena y por ese sueño yo y todo el equipo de trabajo del gobierno a lo largo de todo Chile vamos a trabajar sin descanso, porque 4 años son cortos vamos a trabajar a toda máquina porque juntos vamos a tener un Chile mucho mejor.
Amigos vamos a seguir trabajando porque queremos que niños y niñas, hombres y mujeres puedan tener un presente y un futuro mejor. A celebrar porque vamos a seguir avanzando en nuestro país para celebrar, para que mujeres y hombres tengamos abiertas las grandes alamedas.
Permítanme tomar unos minutos de su tiempo para hacerles llegar algunas palabras.
Este 11 de Septiembre es un día lleno de simbolismos. Recordamos un nuevo aniversario del golpe de Estado que dio inicio a uno de los capítulos más dolorosos de la historia de Chile.
Por eso, desde la casa de los Presidentes y las Presidentas de Chile, deseo enviar un saludo de afecto a todas las familias y amigos de las miles de víctimas de la dictadura.
Y quiero esta noche, cuando se cumplen seis meses de que asumimos el Gobierno de la Nación, comunicarles que en el día de ayer, el Congreso aprobó el proyecto de ley de Reforma Tributaria, cuya versión original presentamos el 31 de marzo de este año.
En este momento, y frente a ustedes, renovamos la palabra empeñada al cumplir uno de nuestros compromisos que fue llevar adelante una reforma tributaria que nos permitirá, ya a partir de este año, entregar beneficios a la gran mayoría del país a través de programas sociales, de la reforma educacional y de inversión en salud e infraestructura.
Nos llena de satisfacción que luego de un debate amplio, que fue a ratos arduo y difícil, las diferentes fuerzas políticas hayan logrado un acuerdo y apoyen la reforma tributaria.
Quiero reconocer el apoyo que recibimos de los diversos sectores políticos y gremiales en este proceso. Y con ello me refiero a sectores de la Nueva Mayoría y también de oposición e independientes, a pequeños, medianos y grandes empresarios, académicos y profesionales que participaron de esta discusión y que enriquecieron nuestra propuesta.
Creemos firmemente en el diálogo, en el aporte para enriquecer y perfeccionar nuestros proyectos, porque esa es la forma de hacer los cambios que Chile necesita.
Este proyecto, con todas las indicaciones que se le incorporaron, mantiene el espíritu de la reforma tributaria que planteamos originalmente a la ciudadanía y al Parlamento: una reforma tributaria positiva para Chile porque es justa, ya que hace que los que ganan más, paguen efectivamente lo que corresponde.
Aquí quiero ser muy clara. Nuestro compromiso es que sean las empresas y personas con más recursos quienes aporten a esta reforma, y no los más pobres o la clase media.
Pensando en proteger a estos sectores es que no se subirá el impuesto de timbres y estampillas en las operaciones de viviendas DFL-2, lo que incluye al 80% de las viviendas que se venden en nuestro país. Asimismo, se estableció en la reforma que ninguna vivienda con subsidio estatal se verá afectada por los cambios impositivos.
Segundo, esta reforma disminuirá la evasión y elusión tributaria. Cada persona que no paga sus impuestos, está restando recursos a las enormes tareas que tenemos como país, especialmente en
materia de protección social, que es donde se gastan dos de cada tres pesos de nuestros recursos públicos.
Tercero, esta reforma permitirá tener incentivos modernos a la inversión y al ahorro. Estamos eliminando el FUT, e incorporando controles para que las utilidades retenidas en las empresas se destinen realmente al ahorro y la inversión y no a otros fines. Junto a ello, las PYMES recibirán un trato preferencial, que contempla beneficios largamente esperados, como la ampliación del régimen de tributación simplificada a aproximadamente el 97% de estas empresas, que a contar del próximo año sólo tributarán por su flujo de caja y que tendrán 60 días más para pagar el IVA. De esta forma podemos empezar a hablar de un verdadero estatuto tributario MYPIME en Chile.
Y cuarto, se recaudarán 3 puntos del PIB, que equivalen a unos 8.300 millones de dólares. Recursos que serán invertidos directamente en mejorar la vida de los chilenos y chilenas en el corto, mediano y largo plazo.
¿De qué manera? En cosas muy concretas, como destinar más de la mitad de lo recaudado para la reforma educacional, de modo no sólo de mejorar la calidad, sino de asegurar que el acceso a una buena educación no dependa del bolsillo de las familias ni tengamos más jóvenes endeudados como resultado de sus estudios superiores.
Con esta reforma tributaria financiaremos una educación de calidad y gratuita. Ésta será realmente un derecho para nuestros niños, niñas y jóvenes.
Gracias a la reforma tributaria podremos realizar las inversiones en la salud pública, en infraestructura, insumos, tecnología, remedios y en profesionales que requieren los centros de salud pública a lo largo del país, que es donde se atiende el 80% de los chilenos y chilenas.
Y también podremos fortalecer el sistema de protección social, que tiene como foco central el acompañar a nuestros compatriotas desde la gestación hasta que son adultos mayores.
Pero no sólo eso. Con la aprobación de la Reforma Tributaria estamos entregando una señal enorme de estabilidad y certidumbre a la economía chilena. Estamos definiendo la carga tributaria que nos acompañará por los próximos años y décadas. No olvidemos que las dos reformas anteriores de esta magnitud fueron en el gobierno del Presidente Frei Montalva en los años 60, y la otra en el de Patricio Aylwin, a comienzos de los años 90.
Hoy, al aprobarse este proyecto, estamos en un mejor pie para enfrentar el proceso de desaceleración que enfrenta nuestra economía, ya que cualquier duda que pudo haber existido, ha quedado despejada y no habrá más incertezas en algunos sectores o especulaciones.
Gracias a esta reforma tributaria podremos en los próximos años invertir fuertemente en infraestructura y capital humano para un mayor y mejor crecimiento económico del país.
Amigas y amigos:
Han pasado 41 años desde el golpe militar que marcó para siempre la historia de Chile. Si hay una lección que tenemos que sacar como país es la condena más absoluta a la violencia en todas sus formas, venga de donde venga.
Los chilenos hemos aprendido el valor de la paz y de la democracia.
Hemos aprendido a resolver nuestras diferencias dialogando y dentro del marco de las instituciones democráticas.
Hemos avanzado mucho y, por lo mismo, debemos cuidar lo que tenemos. No permitiremos que ningún grupo o sector afecte la seguridad de las personas y el derecho que todos tenemos a vivir en paz y tranquilidad.
Los invito a que reafirmemos nuestro compromiso por la unidad de Chile, el compromiso por el interés común de la patria, que debe estar mucho más allá de la división o la ventajas particulares.
Miremos con serenidad y sobre todo con mucho optimismo lo que viene.
Tenemos tareas importantes que sacar adelante como país y ahora contamos con los recursos.
La historia nos muestra que los chilenos y chilenas somos capaces de grandes cosas si lo hacemos reunidos, con diálogo, rechazando la violencia y con el aporte generoso de todas y todos.
La ex presidenta de Chile y actual Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, se sumó al desafío #SafeHands y mostró, a través de un video de Twitter, cómo lavarse correctamente las manos para cuidarnos del Covid-19.
En el mismo video, agregó enfáticamente que el acceso al agua no debería ser un privilegio, si no un derecho humano.
“Tal como el mundo sigue combatiendo la pandemia del coronavirus, nosotros necesitamos seguir lavándonos las manos regularmente. Es una de las cosas más simples y efectivas que podemos hacer para mantenernos a salvo”
Revisa el vídeo a continuación:
As we continue to fight #COVID19, we need to keep washing our hands regularly & thoroughly.
Thank you, @UN DSG @aminajmohammed for inviting me to the #SafeHands challenge! I now invite @SharanBurrow, @MarinSanna & @CatarinadeAlbuq.
Now, more than ever, we must #LeaveNoOneBehind. pic.twitter.com/a2rvva0l0H
— Michelle Bachelet (@mbachelet) April 21, 2020
¿Qué es el #SafeHands?
El #SafeHands es un desafío viral que está tratando de instaurar la OMS (Organización Mundial de la Salud) y que tiene como objetivo educar sobre el cuidado y la prevención del Covid-19.
Sobre el desafío, además de la ex Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, son muchos los famosos que se han sumado. Entre los más destacados tenemos a Hugh Jackman, Didier Drogba y Mariah Carey.
Termina un año intenso, de esfuerzos y logros, y damos la bienvenida a un 2018 con nuevos desafíos y esperanzas.
Éste es el último saludo de fin de año que les dirijo como Presidenta de la República. Es un buen momento para agradecerles a todos ustedes su compromiso para que hoy tengamos un mejor país, con mejores bases para seguir progresando.
Jamás he perdido de vista que soy Presidenta por ustedes, por mi país, que conozco a fondo y que he visto progresar. Siento orgullo por lo que somos, por lo que hemos hecho y por lo que unidos como nación podemos hacer.
Por eso mi mayor satisfacción es haber cumplido los principales compromisos que asumí ante ustedes. Podrá haber distintas lecturas sobre los logros alcanzados en estos años, pero hay un hecho indesmentible y que nos debe alegrar a todos por igual: nuestra democracia ha ganado fortaleza y madurez.
Chile se apronta a cambiar de gobierno y a renovar su Congreso. Y lo hace gracias a elecciones que, con las reformas emprendidas, se hicieron con más pluralismo, inclusión y competencia. Porque votaron nuestros compatriotas en el extranjero por primera vez, porque el nuevo sistema proporcional permitió que nuevos actores lleguen al Parlamento, porque la Ley de Cuotas permitió que más mujeres estén en la primera línea de las responsabilidades.
Pero ese no es el único motivo para celebrar en estas fechas. Entre todos también hemos ampliado los derechos de las personas y la transparencia de nuestras instituciones. Y confío en que con los años, los muchos avances alcanzados serán motivo de orgullo para el país en su conjunto.
La educación es un pilar para progresar y la demanda más sentida de las familias. Hoy estamosasegurando que 70 mil niños y niñas puedan entrar en la educación parvularia, para que su desarrollo comience con el apoyo y acompañamiento que requieren. Estamos garantizando, además, que el sistema escolar cuente con mecanismos de ingreso justos y transparentes, que no haya más co-pago ni discriminación.
Los liceos y escuelas públicas están iniciando su transición para dejar de depender de los municipios. Tendrán así los recursos y el apoyo técnico que necesitan para asegurar calidad en todas las comunas, sin excepción.
También se han sumado dos universidades públicas que antes no existían, en O’Higgins y Aysén. Ésa es la educación pública que Chile merece.
Y, por supuesto, la gratuidad se hizo realidad y se consolidó. Ya hay 262 mil estudiantes cursando carreras técnicas o universitarias sin endeudarse.
También celebramos que en materia de salud, estamos dejando 21 hospitales construidos, 21 en plena construcción y 16 en proceso de licitación. Y que hoy el tratamiento de las enfermedades crónicas y las de alto costo están cubiertas por el Estado.
Tampoco es menor que hoy 311.329 familias que no tenían vivienda, estén pasando las fiestas en su casa, o tengan la certeza de que recibirán las llaves de su nuevo hogar muy pronto.
En definitiva: hoy Chile garantiza mejores oportunidades para todos sus hijos e hijas.
Los 17 millones y medio de personas que habitan esta tierra pueden ver con sus propios ojos la nueva infraestructura, los nuevos paneles solares y eólicos que nos permiten producir energía limpia. Pueden disfrutar las áreas marinas y parques que están ahora bajo protección, porque Chile ha aprendido que se puede crecer y cuidar nuestro entorno al mismo tiempo.
Hoy vemos nuestra economía repuntar y sabemos que tenemos no sólo una base más sólida para el desarrollo, sino también una sociedad más justa, con más bienestar para todas las personas.
Cómo, entonces, no estar contentos en estas fechas y no tener plena confianza en nuestras capacidades como país, en nuestro dinamismo, nuestra creatividad, que se nutren de nuestra diversidad.
Ése es el Chile mejor que ya está aquí, un Chile con más capacidades, con desafíos nuevos y un horizonte más amplio para su desarrollo. Un Chile que sabrá enfrentar los cambios y aprovechar la riqueza de su diversidad. El país que no me cabe duda seguirá creciendo con espíritu republicano, con convivencia fraterna y respetuosa.
Esta noche, junto a quienes queremos, recordemos lo mucho que hemos logrado individual y conjuntamente. Despidamos este 2017 lleno de cambios y de logros y demos la bienvenida al futuro que se asoma y para el que tanto hemos sembrado.
La ex Presidenta de Chile y actual comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, pidió desde su cargo que los países de latinoamérica abrieran sus puertas y permitieran el regreso de sus compatriotas, aún en tiempos de Pandemia.
¿Qué dijo?
“En virtud del derecho internacional, toda persona tiene derecho a regresar a su país de origen, incluso durante una pandemia”
Si los gobiernos no permiten el regreso de migrantes, «les colocan en situaciones de extrema vulnerabilidad, en particular durante la actual pandemia del Covid-19.
En virtud del derecho internacional, toda persona tiene derecho a regresar a su país de origen, incluso durante una pandemia.
Me aflige ver que la pandemia de la Covid-19 está causando estigmatización y discriminación, tanto entre estados como dentro de ellos, en muchas regiones del mundo.
Contexto
Con la pandemia ya expandida en todo el mundo y ya muy cercanos a alcanzar el millón de muertes por Coronavirus, son muchos los países, sobre todos de sudamérica, que han cerrado las fronteras tanto como para entrar o salir del país.
¿El problema de lo anterior?
Hay muchos chilenos, bolivianos, mexicanos, colombianos, etcétera, parados en lugares que no son su país de origen, con muchos problemas económicos y sin apoyo del gobierno.
Bolivia y Chile
El pasado 26 de marzo Bolivia cerró sus fronteras y más de 1000 bolivianos quedaron encerrados en Chile sin posibilidad aún de volver.
Según han informado los noticieros chilenos, gran parte de ellos han estado durmiendo en la calle, sin protección ni tampoco un techo que los proteja.
Por ahora no hay luz verde para su regreso, pero desde Estados Unidos y la ONU, Michelle Bachelet está mostrando una posición firme para que la situación cambie.